Te ocupas de tus asuntos cuando algo desencadena el recuerdo de una situación o de una persona. Siente algunos malos sentimientos alrededor de la barriga. Quieres dejar de pensar en eso, pero sigue regresando como una mosca zumbadora en un caluroso día de verano. ¿Suena familiar?
Los pensamientos negativos y las emociones resultantes son bastante comunes. Sin embargo, pueden convertirse en un problema si no los identifica y no los detiene con la suficiente antelación. Si no se controlan, pueden expresarse a través de acciones dañinas y afectar a los que le rodean. Nuestra primera reacción a los pensamientos negativos es el deseo de matarlos, exterminarlos, aplastarlos como la mayoría de las cosas que encontramos repulsivas en nuestra sociedad. ¿Es posible algo así cuando se trata de pensamientos? Para mantenernos alejados de ellos, tendemos a ocuparnos con el trabajo o entregarnos a adicciones como el alcohol, el tabaco o los juegos de azar. Estas estrategias pueden funcionar por un tiempo, pero solo son supresores de pensamientos que solo quieren un poco de amor y atención. Las emociones son la brújula de cómo lidiamos con nuestros problemas más íntimos. Los pensamientos son la forma que damos a tales emociones. Al igual que los niños, aparecen para saludar de vez en cuando. Si no estás allí, seguirán regresando hasta que los reconozcas y luego seguirán felizmente en su camino. Las emociones y los pensamientos ocurren en el momento presente. Cuando tu mente está ocupada con el trabajo o atrapada en una adicción, no estás ahí, por lo que seguirán regresando. Entonces, ¿qué puedes hacer para estar ahí? Se nos enseña a prestar atención a lo que sucede a nuestro alrededor. Rara vez pasamos tiempo mirando hacia adentro. Cuando éramos niños, ¿con qué frecuencia tus padres o profesores te preguntaban cómo te sentías en una situación determinada? ¿Su familia habló sobre las emociones o algo se escondió debajo de la alfombra? ¿Cómo matar los pensamientos negativos? Afortunadamente, las escuelas, las empresas y las instituciones médicas finalmente se han dado cuenta del papel que juegan las emociones en nuestras vidas y cómo pueden afectar nuestros patrones de pensamiento. Algunos ofrecen apoyo emocional con sesiones de psicoterapia, clases de inteligencia emocional, yoga, yoga de la risa, constelaciones familiares y taichi. Así que ahora que te preocupas lo suficiente por tus emociones y pensamientos, estos son algunos hábitos que pueden ayudarte a ser más consciente de tu estado mental y atrapar el viento a favor de los pensamientos negativos. Comience a Meditar Comience o termine su día con meditaciones de unos minutos Si nunca lo practicó, comience con un minuto y aumente gradualmente a 15 o 20. Siéntese en una habitación tranquila con ropa cómoda y preste atención al sonido de su respiración o el ventilador, el movimiento de una vela o una flor. Cada vez que su atención se desvíe, simplemente nótelo y, sin juzgar, concéntrese de nuevo. Asegúrese de no tener expectativas sobre la sesión de meditación. Sea amable con usted mismo. Disfruta de la Naturaleza ¿Cómo matar los pensamientos negativos? La naturaleza tiene este increíble poder para llevarte al momento presente. Pasa un tiempo en un parque, en la playa apreciando el sol, el viento, los sonidos y los olores que te rodean. Pase más tiempo con su mascota y observe lo tranquilo que es. Trate de incorporar esa calidad. Tenga una Dieta Saludable Si los buenos pensamientos son el alimento saludable de la mente, ¿cuáles son los alimentos saludables del cerebro? Existe una conexión científicamente probada entre una dieta saludable y la felicidad. Cuando no tienes pensamientos negativos, estás pensando en positivos o neutrales. Entonces, ¿por qué no optimizalos a través de su dieta? Incorpore alimentos como nueces de Brasil, salmón y espinacas en su menú diario. Presta Atención a tu Conversación Mis padres decian "los pájaros del mismo plumaje vuelan juntos" Como muchos dichos, hay verdad en este. De la misma manera que un imán solo puede atraer a otro imán y un león no se junta con jirafas, nosotros solo podemos estar con personas como nosotros. Una vez más, la naturaleza nos enseña algunas lecciones preciosas. Tus conversaciones atraen a personas con la misma mentalidad. Si tiende a quejarse de su trabajo y de su vida en general, atraerá a personas que apoyen este rasgo. Empiece a prestar atención al tipo de cosas que dice y trate de cambiar su discurso si no le gusta. Esto puede cambiar el tipo de personas que se sienten atraídas por ti. Con un poco de práctica, puede aprender a aceptar sus pensamientos en lugar de eliminarlos por completo. Podemos ser amables con nosotros mismos en este proceso de descubrimiento y eventualmente impactar nuestro medio ambiente. Como dijo Gandhi "debemos ser el cambio que queremos ver en el mundo". En lugar de esperar que los demás cambien para hacernos felices, podemos aprender a procesar las emociones y pensamientos negativos de manera más eficiente. De esta manera, creamos más espacio para la alegría en nuestras vidas.
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AuthorA Evelise le gusta escribir sobre salud y bienestar en una variedad de estilos y géneros. Ella desea ayudar a las personas que sufren de estrés o que buscan una visión distinta de la vida. Su deseo es que todos vivan felices. Parceros RecomendadosArchives
Septiembre 2020
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